CORRUPCIÓN: ORIGEN DE UNA PLAGA SIN CURA
“El origen de la suerte de unos es el origen de la desgracia de otros”, frase perfecta para describir los estragos que viene dejando la corrupción en el Perú.

Maheva Rosales
Redactora
Siglo XXI y aún está presente la duda existencial de si la este mal es el origen o causa de la crisis, como se titula el libro de Alfonso Vadillo, que trata de este tema. Según la Defensoría del Pueblo en el Perú hay vigentes casi 32 mil casos de corrupción, en donde los involucrados son funcionarios públicos, policías, médicos, políticos y empresarios. Los actos de todas estas figuras son los que generan los problemas que deterioran el país.
Remontándonos a la época del incanato, no existen registros en los cuales se indique que hubo corrupción. El Inca dirigía el Imperio y el pueblo trabajaba para subsistir, con empeño y honestidad, para vivir en una sociedad plena y estable. Así que la pregunta es: ¿Cuándo se originó la corrupción en el Perú? Ella ha tomado el poder y se ha convertido en un sistema que probablemente se hizo permanente en el siglo XIX, debido a que en los inicios de la república, Inglaterra nos brindó apoyo económico para pagar las deudas que ocasionaron la guerra por la independencia. Esta nueva deuda externa (que hasta la actualidad sigue sin ser saldada) se atribuyó como interna, y el reconocimiento de esta para el pago, se volvió uno de los casos de corrupción más grandes del país.
Los Petroaudios, las Fotopapeletas, los Narcoindultos, el caso Lava Jato y Cócteles son algunos de los casos de corrupción más sonados de los últimos 18 años de la historia republicana. Lamentablemente esto es una plaga sin cura, que parece, permanecerá por muchos años en el Perú. Quizá yo no viva para ver un país con horizontes de nobleza y libre de corrupción, pero tengo la esperanza de que algún día tendrá la tranquilidad que el pueblo pide a gritos.